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La Atalaya del Vigía Comic Digital
REVISTA ESPECIALIZADA EN CÓMIC
"Sólo los libros fantásticos pueden transmitir la realidad desfasada en la que vivo." David B. / Epiléptico
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Novelistas de la viñeta

Un artículo de Rodrigo Arizaga Iturralde - Introducido el 18/08/2010
La Atalaya del Vigía

La literatura y el cómic siempre han tenido lazos más o menos directos. No entraremos aquí en el tema de si las herramientas de un medio son las mismas respecto al otro. Tampoco en la discusión de si el cómic es un medio inferior al literario –curiosamente los que más defienden esto no han leído un solo tebeo en décadas o conocen siquiera el nombre de algún autor consagrado ¿Merece crédito un criterio basado en la ignorancia?-. Lo que este texto quiere reseñar es la cantidad cada vez mayor de autores consagrados de novela que, con mayor o menos fortuna, se inician en el mundo de las viñetas.

Hace una década los guionistas de cine y TV –Kevin Smith, J. M. Straczynski, Marc Guggenheim, Charlie y Donald Knauf- parecían ser la presa más codiciada a la hora de fichar nuevos talentos. En los últimos años son los novelistas el blanco de todo tipo de propuestas por parte de editoriales de comic. Si casos como los de Max Allan Collins (Camino a la Perdición) o Greg Rucka (más conocido actualmente por su obra en viñetas que por la de prosa) eran una excepción ahora parecen ser casi la norma. ¿Símbolo de la madurez del medio en lo referido a la percepción del público general? ¿Estrategias de marketing de editoriales y autores para abrir nuevos mercados? ¿Sobresueldos apetitosos? ¿Cumplimiento de vocaciones frustradas? Quién sabe.

La línea MAX de Marvel y el sello Vértigo Crime son el mejor ejemplo de esta tendencia. En los últimos años el sello para adultos de Marvel ha sufrido una seria reconversión, pasando a estar destinado a proyectos especiales que, curiosamente, vienen firmados por novelistas: las dos series de la Viuda Negra por Richard K. Morgan, Foolkiller de Greg Hurwitz o Hellstorm de Alex Irvine son algunos ejemplos. Punisher, título estrella del sello MAX, vio precisamente como tras la prestigiosa etapa de Garth Ennis los sustitutos eran tres afamados autores de novela negra: el ya mentado Hurwitz, Duane Swierczynski y Victor Gischler. Estos dos últimos acumulan cada vez más y más proyectos dentro de la editorial: Cable, Inmortal Puño de Hierro y Hombre Lobo en el caso de Swierczynski y varias series sobre Masacre en lo referente a Gischler. El relanzamiento del Caballero Luna a cargo de Charlie Huston, una miniserie del Capitán América de David Morrell y Ultimate Iron Man por parte de Orson Scott Card son otros trabajos con lazos literarios.
Por su parte, Vertigo Crime cuenta con firmas de reconocidos novelistas junto a las de gente como Brian Azzarello y Peter Milligan. Denise Mina –también autora de una discutida etapa de Hellblazer-, Ian Rankin, Jason Starr o John Evans son algunos de los nombres fichados para este sello policíaco. Asimismo, Stephen King se convertía recientemente en el último fichaje de la editorial con la serie American Vampire, siguiendo así los pasos de su hijo Joe Hill con la más que recomendable serie Locke & Key en IDW. Eso por no olvidarnos de Brad Meltzer, con historias tan potentes como Crisis de Identidad y sus cortas pero interesantes etapas en Green Arrow y JLA.

Pero esto también funciona a la inversa, con guionistas de cómic probando suerte en la literatura. Chris Claremont es autor de dos trilogías de ciencia ficción y fantasia: First Flight y Chronicles of the Shadow War. Alan Moore (La Voz del Fuego), Warren Ellis (Camino Tortuoso) y Mike Carey (la serie del exorcista Felix Castor) han probado suerte en la novela con mayor o menor fortuna. El más exitoso en este campo es Neil Gaiman (Coraline, Buenos Presagios, American Gods), éxito que por desgracia ha hecho que sus trabajos en cómic sean cada más y más escasos. Ya se sabe, lo que el destino nos da con una mano nos lo suele quitar con la otra.

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