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El mercado de las reediciones
En un momento en el que las grandes editoriales de cómic americano parecen cada vez más pendientes de centrarse en eventos futuros y a corto plazo hasta el punto de descuidar el presente, resulta llamativo ver cómo los últimos años sus editoras en España parecen centrarse cada vez más en el pasado.
Por poner un ejemplo, el catálogo de novedades de Panini para Marzo de 2013 incluye hasta nueve publicaciones basadas en material antiguo. Nueve reediciones cuya antigüedad oscila entre un par de años y un par de décadas. Y lo que es aún más llamativo: no se trata de materiales aislados, sino que forman parte de hasta cinco líneas editoriales (cada una con sus propias características editoriales) que Panini comics mantiene de forma continuada: Marvel héroes, Extra superhéroes, Marvel Gold, Marvel Deluxe y Ultimate. No solo se trata de que, al igual que sucede en los USA, varios meses tras su publicación en grapa uno pueda adquirir ese mismo material en un atractivo tomo (algo que puede ser un problema antes que una ventaja para el lector). También se trata de que, en lugar de rastrear el fondo librerías especializadas o recurrir al mercado de segunda mano, uno puede completar tal o cual etapa antigua en solo un par de entregas o incluso en un gargantuesco tomo de más de setecientas páginas (como la reciente recopilación del Spiderman de Roger Stern y John Romita Jr).
Panini en realidad no ha inventado nada: Planeta, anterior depositaria de la publicación de Marvel en España, fue la que inició esta modalidad de recuperación a gran escala con dos –en aquel momento- atrevidas iniciativas: por un lado coleccionables que reeditaban las mejores etapas de algunos personajes (X-Men, Hulk, 4 Fantásticos, Daredevil, Punisher) aprovechando el tirón mediático de sus adaptaciones al cine.
Por otro lado la Biblioteca Marvel, reedición en blanco y negro y formato bolsillo del material más clásico de los personajes en estricto orden cronológico. Pese a no estar exenta de pegas (la calidad del papel o la reproducción de algunos de los materiales originales era discutible) el público respondió gracias a la buena relación de calidad/cantidad/precio. Permitiendo a muchos lectores acceder por primera vez a un material que conocían solo de oídas y que era muy difícil de encontrar. Por no mencionar que buena parte de ese material jamás había conocido una edición previa en nuestro país. Cuando Planeta pasó a ocuparse de DC la jugada se repitió, siendo incluso más notable dada la accidentada trayectoria de DC en España.
El caso es que Panini parece haber aplicado la lección y no sólo ha pulido los defectos de su antecesora (tomos a todo color y con una optima calidad de reproducción), sino que parece apostar incluso con más fuerza por las reediciones. Tanto de material reciente (la línea Ultimate en pleno) y muy reciente (Invasión Secreta, el Iron Man de Matt Fraction y Salvador Larroca), como de material antiguo (los Vengadores de Roger Stern, Los Nuevos Mutantes de Chris Claremont) y muy antiguo (Los Vengadores de Stan Lee y Jack Kirby). Tanto que más de alguno se ha sentido tentado de adquirir la reedición a pesar de poseer la edición previa.
ECC por su parte -aunque a una escala mucho menor- también ha hecho lo propio con su línea de grandes autores, recuperando el Superman de John Byrne, el Batman de Frank Miller o el del dúo Jeph Loeb/Tim Sale.
Esta situación plantea varios interrogantes, como: ¿podemos hablar ya de un mercado paralelo e independiente al de las novedades? Teniendo en cuenta la delicada situación económica, ¿acabaran siendo perjudiciales el uno para el otro? Y dado la cada vez más prolífica política de reediciones, ¿se llegará al punto de que las mismas se solapen y las editoriales se pongan la zancadilla a sí mismas? En cualquier caso nunca antes el aficionado español ha dispuesto de tanto material y tan bien editado. Al menos esta vez es el cliente el que sale ganando.
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