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Spiderman Noir : Ojos sin rostro Nazis en Nueva York
Spiderman Noir : Ojos sin rostro EE.UU. - 2010 Guionista:David Hine y Fabrice Sapolsky Dibujante:Carmine Di Giandomenico
Editorial:Panini -
104 páginas - color
Precio:10,50
Spiderman se ha convertido en el héroe más querido por todos, al mismo tiempo que Franklin D. Roosevelt está en la Casa Blanca y la economía comienza a recuperarse. Además, con Norman Osborn fuera de la ecuación, el crimen organizado en Nueva York ha perdido su cabeza visible. Pero no todo va bien en la América de 1934.
Las primeras imágenes promocionales de este experimento llamado Marvel Noir llamaron podersamente la atención de un servidor. A uno siempre le han gustado los What If? marvelianos o los Otros Mundos de DC, por lo que estas colecciones que situaban a los héroes de la Casa de las Ideas en ambientes pulp, le parecieron a priori una buena idea. Sin embargo, casi todos los títulos que salieron al mercado mostraron un cierto aire de desgana que no cumplía ninguna de las expectativas generadas.
Casi todas, menos Spiderman Noir. Había algo en ella que la hacía sobresalir del resto. Podían ser los guiones de David Hine y Fabrice Sapolsky, que conseguían narrar una aventura superheroica en toda regla, incorporándole aspectos sociales e históricos de los tumultuosos años 30 estadounidenses. O los dibujos de Carmine Di Giandomenico que dotaban al cómic de un aspecto europeo, más cercano a los álbumes publicados a este lado del charco que al cómic USA. Aquella colección fue la que más fielmente consiguió capturar la atmósfera noir que prometía la iniciativa.
Ahora nos llega su segunda parte. Este Ojos sin Rostro nos devuelve al Peter Parker de los años 30, ahora ya ejerciendo de Spiderman a tiempo completo y enfrentándose a la lucha por el poder en los bajos fondos que ha generado la desaparición del Duende. Un complot del que forman parte la emergente ideología nazi, siniestros científicos encabezados por el mismísimo Otto Octavious y el crimen organizado. Esos villanos serán la base de esta saga, en la que también conoceremos a las versiones de Mary Jane o Robbie Robertson de este universo.
Una lectura amena con un aire diferente que nos permite mantener la esperanza en que habrá otra obras dentro de este sello que tendrán la calidad suficiente para mantenerlo en el mercado.
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