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Batman Confidencial Vol. 7 El murcielago y la bestia
Batman Confidencial Vol. 7 EE.UU. - 2010 Guionista:Peter Milligan Dibujante:Andy Clarke
Editorial:Planeta de Agostini -
120 páginas - color
Precio:10,95
Esta propuesta se está convirtiendo en una opción segura para los que buscan disfrutar de buenas historias de Batman sin tener que preocuparse de todo lo que ocurre en las colecciones mensuales del personaje. Lejos de las enrevesadas y complejas tramas urdidas por Grant Morrison y compañía en el universo actual del murciélago, Confidencial nos trae series limitadas realizadas por interesantes autores que buscan aportar su pequeña pieza al pasado, presente y futuro del justiciero.
Este volumen nos trae una aventura escrita por Peter Milligan, autor que parece estar viviendo una nueva época dorada si hacemos caso a la cantidad de proyectos que llevan su nombre. El guionista ya realizó algunos números de Detective Comics en el pasado y vuelve ahora para llevar a Batman lejos de la relativa seguridad de la calles de Gotham.
Un señor del crimen moscovita conocido como El Zar ha amenazado Gotham City. Tras comunicar que tiene en su poder una bomba nuclear, Batman decide viajar a Rusia para frenar el reinado de terror de este villano y así evitar cualquier desgracia en la ciudad que ha jurado proteger. Sin embargo, una vez allí, descubrirá que sus métodos y el terror que proyecta en Gotham no sirven de nada en Rusia. Además, el Zar cuenta con la ayuda de un ser sobrehumano que se oculta en las cloacas y que responde al nombre del Oso.
Y no podemos negarlo, la historia que nos cuenta Milligan no es increíblemente original. De hecho, en muchos momentos navega por aguas muy transitadas pero, en ningún momento llega a aburrir. Policías borrachos con un pasado que ocultar, seres deformes que son más de lo que parecen y crueles mafiosos se dan cita en una saga que funciona gracias al buen hacer de sus autores. Andy Clarke ilustra sus páginas con una limpieza inaudita, que recuerda en muchos momentos al arte de Kevin Maguire, y un estilo que retrata perfectamente esa sensación de estar fuera de su elemento que Batman tiene en su paseo por Moscú.
Un volumen de agradable lectura que, sin ser nada del otro mundo, es una gran elección para aquellos que sólo buscan un rato de diversión sin más complicaciones.
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