Fandigital y Comicdigital emplean cookies para determinadas funcionalidades. Si continúa navegando asume la aceptación de las mismas.
Daredevil, 33 Comic Digital
REVISTA ESPECIALIZADA EN CÓMIC
"Reed es tan listo que sabe matarnos dos veces en cinco minutos" Johny Storm/ Ultimate 4 Fantásticos #6
ID

Daredevil, 33

Un dulce 'vía crucis'

Un artículo de Jaime de Mora - Introducido el 17/11/2008
Daredevil, 33
Daredevil, 33 Estados Unidos - 2008
Guionista:Paul Azaceta
Dibujante:Ed Brubaker
Editorial:Panini - 24 páginas - color Precio:1,95
PUNTUACION
3,5/5
Con su vida hecha añicos, Matt Murdock comienza a acumular toda su ira y a repartir justicia por su propia mano. La situación es insostenible y sus amigos, con Ben Urich a la cabeza, intentarán ayudarle a recuperar la cordura. Claro que hay gente a la que eso no le interesa.

Cabe preguntarse hasta dónde llegará Daredevil en su caída a los infiernos. Ed Brubaker, apoyándose en las bases de Brian Michael Bendis, ha instalado al personaje en la mayor de las miserias en los últimos meses y esta entrega refrenda todo lo ocurrido tiempo atrás. Bien es cierto que el autor estadounidense narra sus penurias con un realismo impactante, lo que provoca en el lector mayor empatía y sentimiento de pena con el personaje. La situación psicológica de Matt Murdock es insostenible, esta vez parece que no va a poder salir sólo y por eso el papel de los personajes secundarios será vital.

Aquí entra en escena Ben Urich, una vez más narrador de la historia, como ya ocurrió en los mejores tiempos de el Hombre sin Miedo con Frank Miller y Michael Bendis. El reportero aporta esa visión objetiva y cercana que cuenta desde el lado humano qué está pasando con el protagonista. Para continuar con la historia, el periodista deberá superar un duro dilema moral: publicar información que puede perjudicar a su amigo superhéroe o renegar de sus obligaciones profesionales y abstenerse de informar sobre él.

Y Mientras Michael Lark se da un merecido descanso en este número, el dibujo de Paul Azazeta cumple sin maravillar. La suerte la ha tenido por ir a parar en una colección en la que, como ocurre en contadas ocasiones, los diálogos son más importantes que el dibujo. Así lo confirma la conversación entre Foggy y Urich de esta entrega.


contactarEdición impresa