Fandigital y Comicdigital emplean cookies para determinadas funcionalidades. Si continúa navegando asume la aceptación de las mismas.
La Atalaya del Vigía Comic Digital
REVISTA ESPECIALIZADA EN CÓMIC
"¿ Porqué buscar Inteligencia Artificial cuando tenemos estupidez auténtica?" Tomorrow Stories # 1
ID

Tierra X: Cronología Alternativa de Marvel

Un artículo de Rodrigo Arizaga Iturralde - Introducido el 01/01/2014
La Atalaya del Vigía

Dentro del género de los superhéroes las historias de mundos alternativos siempre han sido un concepto muy apreciado por los fans. La principal razón es que dichas historias permiten romper el status quo poniendo a los personajes en situaciones imposibles debido a los imperativos comerciales de la continuidad. La labor de Mark Waid y Alex Ross en Kingdom Come es un ejemplo palmario de esas virtudes.

Más allá de su impresionante apartado gráfico, Kingdom Come llamó la atención por ser una suerte de “última historia” del universo DC, mostrando a los héroes envejecidos y frente a una nueva y descontrolada generación de superseres. Poco después, a modo de guiño, la revista Wizard encargó a Ross una serie ilustraciones que mostrasen el mismo proceso de haberse realizado en Marvel. La respuesta fue tan entusiasta que Marvel decidió hacerla realidad.


Ross, con la ayuda del guionista Jim Krueger, desarrolló una ambiciosa propuesta que abarcaba a la práctica totalidad del universo Marvel. Tierra X describía un mundo radicalmente alterado donde todos los habitantes del planeta tenían poderes debido a una desconocida plaga -similar a la saga literaria Wild Cards-. Este nuevo status quo daba lugar a situaciones como que Inglaterra, Rusia y Japón se hayan convertido en imperios gobernados por el Capitán Britania, Coloso o Fuego Solar o que Norman Osborn sea el presidente de los EE.UU. La propuesta de hecho era tan ambiciosa que, además de describir ese mundo futuro, también repasaba y ordenaba toda la cronología editorial. De hecho la serie empezaba con un #0 donde el Vigilante exponía la historia del planeta desde la llegada de los Celestiales, la presencia de los Eternos y los Desviantes, la influencia de diversas razas alienígenas o la función de Galactus en el orden del universo.


La narración a cargo del Hombre Máquina -convertido en ayudante forzoso de Uatu el Vigilante, ciego desde hace años- proponía una historia coral donde se entremezclaban el regreso de los Inhumanos a la Tierra tras años de ausencia, un poderoso mutante capaz de controlar la voluntad de los que le rodean y un evento cósmico relacionado con los Celestiales. Pero lo chocante eran los cambios en la mayoría de los personajes: Thor convertido en una mujer; Clea como la nueva hechicera suprema; Bruce Banner convertido en un niño y separado de Hulk; Mr. Fantástico trastornado tras la muerte de sus compañeros y asumiendo la identidad del Dr. Muerte; Spiderman retirado, gordo y deprimido; el Capitán América envejecido y defendiendo un ideal que nadie cree; los Vengadores convertidos en androides por un recluso Iron Man


Para decepción de muchos la presencia de Ross en la parte gráfica se limitó a los diseños de los personajes y las portadas, recayendo el dibujo en manos de John Paul Leon. Lo cierto es que, lejos del espectacular hiperrealismo de Ross, el estilo seco y oscuro de Leon se ajusta mejor al tono de ese futuro distópico. Ello aporta una pátina fatalista a la épica de una historia llena de revelaciones sorprendentes sobre los personajes y la verdadera naturaleza de sus poderes. Tanto que en muchas contradecían directamente la continuidad oficial, convirtiendo la historia en no-canónica.


El éxito de la serie llevó a la creación de dos secuelas: Universo X y Paraíso X. Leon fue sustituido por Doug Braithwaite, quien supo mantener las virtudes de su predecesor. Desgraciadamente no sucedió lo mismo con el guión de Krueger y Ross. El argumento se afanaba de forma obsesiva en unificar absolutamente todos sus personajes e historias en una única trama coherente, a pesar de la disparidad inherente de los mismos. Las tramas se complicaban cada vez más, cayendo en disquisiciones filosóficas y giros cada vez más complicados, llegando a extremos farragosos o directamente absurdos. Si a ello añadimos que la editorial obligó a cambiar el final de Paraíso X para que ocupase menos páginas, el resultado de las secuelas es tremendamente irregular. No obstante, la llamada Trilogía X –especialmente su inicio- supone una lectura interesante que permite disfrutar el universo Marvel de una manera original.


contactarEdición impresa