47 Ronin

Nueva adaptación de uno de las más célebres pasajes históricos de Japón

47 Ronin USA - 2014
Guionista:Mike Richardson, Kazuo Koike (Asesor)
Dibujante:Stan Sakai
Editorial:Planeta de Agostini Cómics - 296 páginas - color Precio:12,95€

PUNTUACION
4/5

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¿Qué puede surgir de la colaboración de los creadores de un caballo negro, un conejo ronin y un lobo solitario y su cachorro? Pues una magnífica adaptación de un pasaje de la historia de Japón. Planeta nos trae en un solo tomo la miniserie de Dark Horse 47 Ronin, creada por Mike Richardson junto a Stan Sakai y con el acertadísimo asesoramiento histórico del gran Kazuo Koike. La obra de estos tres autores respeta fielmente el verdadero trasfondo histórico y nos brindan una narración muy bien llevada, marcando perfectamente todos los hitos que cualquier lector profano a la verdadera historia podrá conocer. ¿Pero qué se cuenta en 47 Ronin? Nos trasladamos al Japón feudal, a la época de esplendor de los samurái, donde los grandes señores rendían obediencia al Shōgun, designado por el Emperador y quien era el máximo responsable militar del país y técnicamente quien dirigía la nación. Han pasado casi cien años de la gran guerra civil y la familia Tokugawa que se ha establecido en el shogunato ejerce un estricto control sobre el resto de señores feudales, llamados daimyō. La historia nos cuenta la caída en desgracia de uno de estos daimyō gracias a la perfidia de un funcionario corrupto y cómo sus fieles vasallos se conjuran para resarcir el honor de su señor.

Planeta recoge en un tomo esta magnífica mirada al Japón feudal

Para un lector occidental se trata de una historia de venganza, pero si profundizamos un poco más en la cultura de donde se asienta la trama, vemos una narración que consigue mostrar a la perfección gran parte de la filosofía del bushido. El sentimiento de justicia, coraje, benevolencia, respeto, honestidad y, sobre todo, el honor y la lealtad están presentes en todo el desarrollo de la historia con unos personajes muy bien definidos y evitando caer en el facilísimo cliché de crear una historia de acción, katanas y sangre al tratarse del contexto en el que transcurren los acontecimientos.

¿Y qué han hecho estos tres para conseguir que esta obra esté tan bien conseguida? Richardson ha sintetizado muy bien la trama. Lo cierto es que la verdadera historia de los 47 Ronin tiene algunas diferencias en sus matices según que autor la recogiese en el pasado, pero he visto varias versiones en libros y cine (memorable y épica la del director Hiroshi Inagaki de 1962) y ésta que nos ocupa se encuentra entre las mejores traslaciones del original.

Richardson, Sakai y Koike han conseguido una de las mejores adaptaciones de este célebre pasaje histórico japonés

Stan Sakai no deja su trazo simple y elegante y desarrolla un trabajo técnico muy bueno, acertado con los colores y todo el escenario de la trama, y sin dejar atrás las reminiscencias de Usagi Yojimbo. El dibujante encaja su trabajo de forma exquisita en el contexto histórico, respetando muy bien decenas de pequeños detalles seguramente también dirigidos por Kazuo Koike, gracias a su basto conocimiento de la época en cuestión. Los emblemas de los daimyō son los reales, los kimonos, la vestimenta de los campesinos, las calles, incluso el giro en la mano que hace el típico arco japonés al ser disparado, reflejan fielmente la realidad de aquella época.

El tomo lo completa Planeta con una galería de las portadas publicadas en la miniserie de Dark Horse, el cómo se gestó los 47 Ronin escrito por Mike Richardson, una interesante entrevista a Stan Sakai y la presentación de Richardson de dos autores japoneses, el reconodicísimo Kazuo Koike y un artísta japonés de finales del 19, Ogata Gekko, del cual se reproducen también algunos ejemplos de su obra sobre los 47 Ronin. En definitiva, un tomo muy completo y disfrutable.

Stan Sakai brilla tanto en las escenas de lucha como en los momentos introspectivos que plagan el tomo

Debo confesar que no he podido resistirme a buscar con detenimiento un guiño de los autores, pero no he encontrado rastro de esas dos largas y peludas orejas blancas ni de ese ronin empujando un carrito de bebé.

En definitiva, una gran historia muy bien narrada y dibujada que todo aquel que se llame fan del mundo samurai debería tener en su estantería.