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La Atalaya del Vigía Comic Digital
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"¿Qué derecho tengo yo a imponerle a nadie mis valores?" Superman / All-Star Superman
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El regreso de John Byrne

Un artículo de Rodrigo Arizaga Iturralde - Introducido el 20/07/2011
La Atalaya del Vigía

Siguiendo con el análisis de autores veteranos del otro día, la buena acogida que el relanzamiento de Next Men ha tenido en los USA ha llevado a muchos a hablar del retorno de John Byrne. Cosa paradójica pues en realidad nunca se fue. Y es que los últimos años no han sido especialmente gloriosos para el que ha sido (eso es innegable) uno de los creadores más osados, renovadores, interesantes e influyentes del cómic USA de las últimas décadas.

Británico de origen pero canadiense de corazón, Byrne demostró pronto su gusto por la polémica, creando en su etapa estudiantil una parodia en clave homosexual del género superheroico. Tras una primera etapa profesional para Charlton Comics, su despegue se produjo en Marvel gracias a su encuentro con Chris Claremont en títulos como Marvel Team-up, Héroes de Alquiler o Starlord (para Marvel Preview). Fue aquí donde comenzó pulir su estilo, evolucionando a partir de influencias como Jack Kirby –su ídolo- o Neal Adams para ganar en soltura, rotundidad, naturalidad y capacidad narrativa. Asimismo demostró una rapidez inusual que le permitía ocuparse de varias series simultáneamente mientras en su cabeza iba madurando ideas propias como guionista. Ese desarrollo culminó cuando Claremont requirió sus servicios para dibujar la Patrulla X. El resto es historia. El toma y daca entre guionista y dibujante dió como resultado uno de los cómic de superhéroes más populares e influyentes del medio.

Convertido en estrella, su siguiente paso fue establecerse como autor completo gracias a Los 4 Fantásticos. Durante cinco años Byrne guió al cuarteto remodelando y modernizando el trabajo de su admirado Kirby, logrando la etapa más influyente del grupo. Su ubicuidad le permitió realizar en paralelo Alpha Flight –creado por él mismo-, así como varias etapas de Vengadores, Capitán América y Hulk. En 1986 saltó a DC para relanzar Superman. Tras reordenar y modernizar el origen del personaje en la espléndida miniserie Man of Steel se ocupo de la faraónica labor de escribir y dibujar las tres series regulares del personaje (Superman, Action Comics y Adventures of Superman) durante dos años, a lo que hay que añadir varias miniseries y especiales así como dibujar Legends -primer crossover editorial post- Crisis- y revisar el legado de Kirby con OMAC. Con los 90 volvió a Marvel como guionista (West Coast Avengers, Iron Man) y autor completo (Namor, Hulka) antes de fichar por Dark Horse para crear Next Men y ayudar a Mike Mignola a lanzar Hellboy.
A partir de mediados de los 90 sin embargo su estrella comenzó a declinar. Sus discutibles etapas en Wonder Woman y Spiderman, con reescritura de la continuidad incluida no fue bien recibida por el público y su estilo grafico, antaño fluido e impactante, comenzaba a tornarse anquilosado y repetitivo. Sería falso decir que esta etapa carece de interés, pero pese a la disfrutable lectura de títulos como El Cuarto Mundo, X-Men: Los Años Perdidos o la miniserie Generaciones la repercusión fue más bien escasa. Tampoco ayudaba que, cara al público, el Byrne “personaje” comenzase a desplazar al Byrne autor. Su gusto por las declaraciones polémicas (su opinión sobre Jessica Alba en la película de Los 4 Fantásticos es antológica) le han llevado varias veces a agrios e incluso absurdos enfrentamientos con editores, guionistas, dibujantes e incluso lectores, dándole una especie de aureola de viejo gruñón. Tras una nueva etapa en DC sin mucha repercusión –incluso su reunión con Claremont en JLA pasó desapercibida- recaló en IDW, dedicándose en los últimos años a trabajos alimenticios basados en licencias (Star Trek, Angel, Parque Jurásico). Por suerte, con el regreso de Next Men y un proyecto titulado Cold War Byrne parecen hacer bueno aquello de que quien tuvo, retuvo. ¿Un regreso a la gloria o un espejismo? El tiempo lo dirá.


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