Jóvenes Titanes: Tierra Uno Pubertad sobrehumana
Artículos relacionados
· Batman: Tierra Uno Vol. 2 también presenta portada
· Batman: Tierra Uno
· Superman: Tierra uno vol. 2
Convertido en uno de los guionistas más interesantes de la actual plantilla de DC, Jeff Lemire pone su atención sobre los Jóvenes Titanes reinventando al grupo de superhéroes adolescente por excelencia de la editorial. Y lo hace en una novela gráfica que presenta una nueva versión de los personajes más centrada en su condición de jóvenes que en su naturaleza superheroica.
Inscrita dentro del sello Tierra Uno, una suerte de equivalente a la línea Ultimate de Marvel, pero en forma de obras independientes, el título rompe con la continuidad para volver sobre el origen del grupo. Prescindiendo de personajes como Robin, Wondergirl o Kid Flash -que requerirían un trasfondo ajeno para ser explicados-, esta versión de los Titanes se centra en el primer encuentro de Cyborg, Terra, Beast Boy, Jericó, Raven y Starfire. Los cuatro primeros son alumnos de un instituto de Oregón que arrastran tras de sí dilemas propios de su edad como la incomprensión de los padres, los romances adolescentes o la tirante convivencia con el resto de compañeros de aula. La trama narra el progresivo descubrimiento de un terrible secreto que les une a ellos y sus padres. Algo que se manifiesta tanto en forma de extrañas habilidades sobrehumanas como mediante extraños sueños que no comprenden. Sueños relacionados con la extraterrestre cautiva Starfire y que también afectan a Raven, una joven india navajo que aprende las enseñanzas de su abuelo chamán.
|
Jeff Lemire y Terry Dodson reinventan a los Jóvenes Titanes en esta nueva novela gráfica de Tierra Uno |
Lemire altera por completo el trasfondo y relaciones de los personajes para darles un origen común tanto a ellos como a sus habilidades sobrehumanas. Asimismo, personajes como Deathstroke o la citada Raven aparecen cortados según un patrón muy distinto al de sus versiones originales, tanto en lo argumental como en lo estético. Todo ello al servicio de un guión que busca narrar una historia de transición a la madurez, donde cambios físicos como la piel metálica de Vic Stone y el color verde de Gar Logan funcionan como metáfora de la pubertad mientras que el desengaño de Tara Markov con su madre o el carácter solitario de Joseph Wilson manifiestan la rebeldía y angustia propia de la adolescencia. El guión consigue interesar al lector en el viaje emocional por el transitan los protagonistas, convirtiendo las escenas de acción y despliegue de superpoderes en algo secundario para el desarrollo de la historia. Desgraciadamente, la trama de Raven acaba quedando algo descolgada, debido a su escasa relación con el resto y a lo forzado de su conexión.
|
¿Qué secretos comparten las nuevas encarnaciones de personajes como Raven, Starfire, Cyborg o Beast Boy? |
El apartado gráfico corre a cargo del siempre interesante Terry Dodson que, manteniendo su característico trazo reminiscente del cartoon, consigue una narración más dinámica y verosímil, en sintonía con el tono más mundano de la premisa y sin abusar del “postureo” en el que suele caer cuando dibuja superhéroes. Algo que se aplica también a sus diseños de los personajes, si bien en el caso de Deathstroke no acabe por resultar acertado.
Quizá el mayor pero que puede ponérsele a esta revisión de los Titanes es que acaba descubriéndose como un mero preludio, dejando numerosas tramas abiertas, personajes apenas presentados –Starfire, Tempest...- y al grupo protagonista sin constituirse siquiera como tal. Un cierre inconcluso que impide valorar adecuadamente la obra hasta conocer su más que necesaria (y aún no anunciada) continuación. Mientras tanto el presente tomo supone una lectura ligera y eficaz que agradará a veteranos y neófitos por igual.
|
|
|