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Indestructible Hulk #26-#29 Mark Waid se despide del Coloso Esmeralda
AVISO: Éste artículo contiene posibles spoilers. En él se revelan aspectos argumentales que el lector podría preferir descubir por sí mismo.
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La última etapa de Mark Waid como guionista de la All-New Marvel ha dejado bien claro que sigue siendo uno de los mejores escritores superheroicos del medio. Sus aportaciones en Agentes de S.H.I.E.L.D. o este Hulk han demostrado su buen hacer y la última etapa de Daredevil se ha convertido gracias a su colaboración con Chris Samnee en una de las más recomendables lecturas de la historia marveliana.
Su versión de Hulk como arma de destrucción guiada en manos de S.H.I.E.L.D. y su retrato de un Bruce Banner calculador y ambicioso se ganaron rápidamente el favor de los lectores. Sin embargo, tras una veintena de números y con un nuevo relanzamiento editorial llamado All-New Marvel Now!, la colección debía reinventarse y emprender un nuevo camino que cimentó perfectamente el brutal cliffhanger con el que terminaba el volumen anterior.
Es imposible hablar de lo que Waid nos presentará en esta historia sin dejar escapar algunos SPOILERS, así que os vamos a dar la oportunidad de dejar de leer a partir de este punto. De acuerdo, lo haremos con la oportuna cuenta atrás para que no se os vayan los ojos al siguiente párrafo…
5…
4…
3…
2…
1…
¿Seguís ahí? Bien, pues entonces podemos seguir comentándoos el título. La historia anterior terminaba con Banner habiendo recibido dos tiros en la cabeza y un futuro muy oscuro para el álter ego de Hulk.
Es en este punto exacto donde Waid retoma la historia con la ayuda del nuevo dibujante oficial de la serie: el más que correcto y extremadamente cumplidor Mark Bagley. El guionista nos sumerge de pleno en los hechos inmediatamente posteriores al atentado contra la vida de Banner con un equipo de S.H.I.E.L.D. fichando al mejor cirujano mundial para llevar a cabo una operación a vida o muerte a nuestro protagonista.
Sin embargo, nada es lo que parece en este equipo y pronto descubrimos que el procedimiento quirúrgico esconde un siniestro plan para hacerse con el material genético y el control del Coloso Esmeralda. Y, aunque Hulk consigue escapar al despertar en medio de la operación, el futuro parece reservar un horrible destino a una de las mentes más privilegiadas del universo Marvel: daños cerebrales irreparables que lo despojarán de todas sus capacidades científicas y tecnológicas.
El único pero a esta saga es que supone el adiós definitivo de Waid al personaje. Veremos cómo se la apaña Gerry Duggan –que está haciendo un magnífico trabajo con la nueva versión de Nova y el psicopático Masacre- en la colección. Seguid conectados…
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