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Marvel Gold - La Patrulla X Original Volumen 1 Comic Digital
REVISTA ESPECIALIZADA EN CÓMIC
"Las tendencias son para los borregos" Lady Bullseye / Daredevil vol.2 #112
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Marvel Gold - La Patrulla X Original Volumen 1

El virus mutante empieza a expandirse poco a poco

Un artículo de Mario de Olivera - Introducido el 17/06/2016

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Hablar de los mutantes de Marvel resulta algo bastante complicado. Sí, es una afirmación tan simple como demoledora pero para el seguidor de esta sección viñetil sabrá que no es tan exagerada como podría parecer desde un principio. Para muchos aficionados, la larguísima etapa firmada por Chris Claremont fue determinante para medir todo lo que vino después y, parece, nada estuvo a la altura.

Ed Brubaker, Steven Seagle, Joe Kelly, Mike Carey, Joe Casey… muchos nombres, todos bastante interesantes y de sobrada calidad, fueron los que pusieron su granito de arena en la telenovela por excelencia de La Casa de las Ideas. Poder leer ahora los primeros números que fueron publicados hace eones es una experiencia que, si no se está lo suficientemente preparado, puede ser demasiado castigo. Pero tranquilos, si sabemos a lo que nos enfrentamos, el buen rato está más que asegurado.


Gracias a Panini podemos disfrutar de estas primeras entregas, recopiladas en un grueso volumen, Marvel Gold - La Patrulla X Original Volumen 1, donde unos personajes tan desconocidos como llamativos darían sus primeros pasos hacia el estrellato. Los autores Stan Lee y Jack Kirby colocaban de esta forma otro ladrillo para asentar las bases del Universo Marvel, la enésima propuesta, algo más bizarra que de costumbre, que se sacaban de la manga para dejar embobados a sus lectores. Échense a un lado porque aquí vienen el Profesor Xavier, Cíclope, Jean Grey, El Ángel, La Bestia y el Hombre de Hielo.


Quizás los guiones del bueno de Lee no estén tan bien “rematados” como los de otras colecciones como Los Cuatro Fantásticos, sería muy difícil, pero sigue siendo una lectura lo suficientemente original como para que el disfrute sea algo serio. Puede que jugara en su contra el hecho de que esta colección no surgía por iniciativa propia de los autores sino de un encargo editorial, tanto que, para el que no lo sepa, la colección estuvo a punto de ser cancelada a la altura del número 66 pero, gracias a una carambola, la espada de Damocles quedó envainada.

Esta primera entrega (de las tres que van a rescatar del olvido este material añejo) recupera los primeros 26 tebeos protagonizados por Xavier y los suyos, y en ellos nos vamos a encontrar amenazas de todos los colores y tamaños: Magneto, El Desvanecedor, La Mole, La Hermandad de Mutantes Diabólicos, Cerebro, Unus El Intocable, Juggernaut, Los Centinelas, Molde Maestro o Mímico. Muchos de ellos siguen pululando este particular microverso a día de hoy, algo que dice bastante acerca de la importancia de todo lo que vamos a poder leer en este nuevo Marvel Gold.


Unos guiones en los que Stan Lee deja caer algunas de sus perlas más celebres, sobre todo, a lo que el género femenino se refiere. Mujeres que son poco más que un florero y cuyas principales preocupaciones son el maquillaje, las compras y suspirar de manera romántica por algunos de sus compañeros. Bien es cierto que estamos ante unos cómics con más de cincuenta años a sus espaldas, hijos de una época que, afortunadamente, ha quedado bastante atrás. Más tarde entrarían otros nombres como Roy Thomas y Werner Roth, autores que hicieron también un buen trabajo pero que el resultado final parece resentirse un poco. Estamos acostumbrados a lo que estamos acostumbrados y la sombra de Claremont es amplia.


La dupla Lee-Kirby facturaba comics con los ojos cerrados y sabía perfectamente lo que la juventud le iba a demandar, tocaba dejar volar solos a los “nuevos” para ver qué tal les iba. Obviamente, estas aventuras no gozan de la espectacularidad de otras etapas, pero la nostalgia y el cariño que desprende cada una de las páginas del volumen suple esa carencia para que los aficionados más veteranos puedan gozar de un material mítico en una edición inmejorable.

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