Abandono Los Vengadores
Esta frase parece tomada de aquel especial realizado por Sergio Aragonés sobre el universo Marvel (allá el blanco de sus puyas eran los 4 Fantásticos), pero el uso que se le da aquí no tiene tanta gracia. Y es que el anuncio a bombo y platillo de una tercera serie regular de Los Vengadores escrita por Brian Michael Bendis es la gota que desborda el vaso.
Examinemos detenidamente los hechos. Avengers Assamble se anuncia como una nueva serie regular escrita por Bendis y dibujada por Mark Bagley en lo que supone la reunión del bien afinado equipo creativo de Ultimate Spiderman. Los integrantes de este nuevo grupo incluirán al Capitán América, Iron Man, Thor, la Viuda Negra, Ojo de Halcón y Hulk en un proyecto milimétricamente calculado para aprovechar el tirón de la inminente película de Joss Whedon (que presenta idéntica alineación). Era esperable - inevitable más bien- que la editorial no desaprovechase semejante plataforma mediática. Pero, más allá de lo puramente crematástico: ¿Hay motivo para este proyecto?
No vamos a negarle ahora a Bendis sus méritos. Kurt Busiek devolvía en los 90 la calidad y la dignidad a una serie que llevaba varios años de capa caÃda, pero fue Bendis quien la devolvía a lo que era en su inicio: el epicentro del universo Marvel. Con aciertos y errores sus Nuevos Vengadores se convirtieron en la piedra de toque de la editorial, el tronco a partir del cual se desarrollaban en mayor o menor medida el resto de series. Pero este éxito hizo que la ambición del guionista (y la editorial) desbordase los límites de la cabecera y creciese exponencialmente. Poderosos Vengadores primero y Vengadores Oscuros después suponían para Bendis la oportunidad de plasmar a gran escala el ambicioso marco que había creado en la primera serie. Funcionaba porque supo dar a cada título un tono y un estilo bien diferenciados, pero ahí las costuras ya empezaban a deshilacharse: las historias se veían infladas (vía descompresión narrativa excesiva) y repetitivas (Nuevos Vengadores pasó a convertirse en una sucesión de peleas con el Encapuchado), con rellenos descarados (los crossovers con Invasión Secreta, donde en ocasiones no había un solo vengador) y un interés a corto plazo con Bendis abandonando las series a los pocos números y la editorial dejándolas morir lentamente (Poderosos Vengadores de Dan Slott).
El punto y aparte que supuso Asedio y el reinicio subsiguiente parecían poner un poco de orden, pero no fue así. Además de una tercera serie a cargo de Ed Brubaker (Vengadores Secretos) que pronto cambiaria de guionista y rumbo, Bendis seguía al frente de dos cabeceras (Vengadores y Nuevos Vengadores), que prácticamente intercambian sus personajes como si fuesen cromos y arrastran los peores defectos de la etapa previa (el primer arco de Vengadores, dibujado por John Romita jr, es un sinsentido de viajes temporales que necesita media docena de números para una trama que el Roger Stern de los 80 podría contar en uno). Teniendo en cuenta semejante bagaje: ¿De verdad nos quieren convencer de la necesidad de una (otra) nueva serie regular? Si Bendis apenas cuenta algo con dos series a su disposición, ¿qué puede contarnos añadiendo una tercera? ¿Y cómo va a justificar la presencia simultánea de los personajes en TODAS las colecciones?
A título personal, ya tuve bastante sobredosis de cómics superfluos con los mutantes durante los 90. Si la intención actual de Marvel es repetir jugada, que no cuenten conmigo. Mi paciencia, mi estantería y mi cartera ya no dan más de sí.
|
|
|