Wonder Woman: La Verdadera Amazona

Jill Thompson nos acerca a los orígenes de la Princesa Amazona

Tweet

Artículos relacionados

Jill Thompson es una magnífica guionista y una artista impresionante. A lo largo de su dilatada carrera, la Thompson dibujante ha formado parte de propuestas mayúsculas como Los Invisibles, Fábulas, Orquídea Negra, Los Animales de Burden Hill y, por supuesto, Sandman. Su personal estilo la convertía en la elección perfecta para pasearse por mundos mágicos, mentes desquiciadas y sueños febriles en los que su estilo cartoon demencial dotaban de una pátina fascinante las páginas de autores como Gaiman, Dorkin o Morrison.


Sin embargo y a pesar de que su carrera como ilustradora se fraguó en títulos adultos, la Thompson escritora siempre ha sentido predilección por propuestas destinadas al público joven e infantil en el que destacan obras como Scary Godmother, Los Pequeños Eternos o sus aportaciones a la colección Bart Simpson´s Treehouse of Horror. Aquí se descubre por una escritora preocupada por los inicios de los personajes con una sensibilidad inigualable para componer escenas dulces con los más grotescos ingredientes a su alcance, una suerte de amalgama extravagante entre la estética de Tim Burton, la visión de J. K. Rowling y la ternura del mejor Disney.


Aún así, cuando te enfrentas a una nueva historia centrada en el archiconocido origen de Wonder Woman, no puedes evitar que te asalte una sensación de cansancio lector. Diana es un personaje con decenas de años a sus espaldas cuyas primeras aventuras han sido narradas hasta la saciedad. ¿Cómo puede ningún autor, incluso alguien de la talla y las capacidades de Thompson, presentar algo medianamente original y atractivo con una base tan trillada como esta?


La respuesta es este Wonder Woman: La Verdadera Amazona, una fábula nacida en el DC más mágico que nos traslada a Themyscira y que, bebiendo de las mitologías clásicas, nos ofrece un relato único que nos hará mirar con nuevos ojos los primeros años de nuestra heroína.


El acierto de la autora es presentarnos a Diana como una joven rebelde, caprichosa y repleta de defectos que se encuentra en la flor de su juventud y que tiene aún mucho que aprender acerca del heroísmo, la bondad y la nobleza. De esta manera, esta princesa amazona se humaniza y nos permite contemplar a nuestra protagonista desde un prisma inesperado.

Una recomendable obra para todos aquellos que quieran conocer por primera vez los orígenes de este vital personaje en la historia del cómic pero, también, una nueva oportunidad de comprender que hay historias que merecen ser contadas un millar de veces.