We Stand on Guard

Los Estados Unidos en guerra contra Canadá

We Stand on Guard USA - 2018
Guionista:Brian K Vaughan
Dibujante:Steve Skroce
Editorial:Planeta Cómic - 200 páginas - color Precio:18,00€

PUNTUACION
4/5

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Estamos en el año 2.112 y Estados Unidos ha declarado la guerra a Canadá, debido al atentado que sufrió su presidenta en la Casa Blanca tiempo atrás, que parece haber tenido su origen en la disputa que mantienen por el recurso canadiense más preciado: su agua. Este es el interesante punto de arranque de la nueva propuesta de Brian K Vaughan, aunque en este caso se trata de una miniserie de seis entregas, nada que ver con otras obras suyas como Ex Machina o Y: El Último Hombre, que llegaban a las cincuenta entregas, o de Saga, que ha superado ya esa cantidad y no parece tener un final cercano a la vista. El guionista sabe aprovechar el espacio y en estas pocas entregas consigue definir sus personajes, el escenario en el que están obligados a actuar y hasta una historia con planteamiento, nudo y desenlace en un espacio de 200 páginas.


Nuestra protagonista es Amber, quien perdió a sus padres durante los primeros ataques americanos hace años y que ahora deambula por los bosques canadienses evitando caer en alguna de las trampas del ejército americano. Allí conoce al Escuadrón 2-4, la última esperanza de los canadienses, que se ha robotizado con gigantescos mecas que parecen salidos de Pacific Rim, para la batalla que resultará inevitable. Aunque no lo parezca con semejante argumento, se trata de una historia de personajes, en la que es más importante saber de dónde viene cada uno que conocer el destino que les aguarda al final del tomo. En un delicado balance, marca de la casa de su multipremiado guionista, se alternan las espectaculares escenas de acción con diálogos que rozan lo absurdo, como aquel en el que los protagonistas se preguntan por la verdadera nacionalidad de Superman o cuando algunos de ellos recuerdan los sacrificios que se han visto obligados a hacer desde que la guerra llegó a sus vidas. Vaughan no se corta en ningún momento para dejar claro su mensaje antibelicista y, por increíble que parezca, pone a los americanos como los malos de la película a pesar de ser estadounidense. Además, el relato incluye partes verdaderamente incómodas para el lector, como la tortura a la que es sometida una de las protagonistas y es que estamos ante una historia sobre la guerra, pero en ningún momento la justifica.


Steve Skroke es el dibujante de la serie y se nota su paso por Hollywood haciéndose cargo de los storyboards de varias películas, ya que en muchos momentos el grado de detalle de que dota a las páginas y la minuciosidad a la hora de mostrarnos con detalle el diseño de robots y vehículos es más propio de un libro de diseños de una gran superproducción que de un cómic. Una historia diferente e interesante que no te dejará indiferente tras su lectura.