Marvel Saga #59 - El Asombroso Spiderman #27: El Desafío - Muda ¡¡¡Algo puede detener al Juggernaut!!!
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Ya avanzamos en la reseña del tomo 25, que los guionistas de Spiderman habían decidido unirse de nuevo para contar una historia de mayor extensión de la habitual, que durante varios meses trataría de recupera a los villanos clásicos del personaje, actualizándolos y, en la mayor parte de los casos, haciéndolos más oscuros y peligrosos. Así, hemos conocido las novedades que personajes como El Hombre de Arena, Rhino o Electro nos presentaban y, a medida que se acerca la conclusión, parece que hayan guardado lo mejor para el final, a tenor de lo que nos espera en este tomo. Para empezar, recuperamos la historia del Rhino para que Joe Kelly y Max Fiumara firmen Especie en Peligro, en la que demostrar que el personaje, eterno segundón, ha cambiado para siempre en sus manos.
Después tendremos de vuelta al Escorpión, en una pequeña historia firmada por Fred Van Lente que, en tan sólo 22 páginas, recupera la esencia del villano y abre varias puertas de lo que podrían hacer con él en futuras historias. Tampoco hace daño a que me hayan conquistado con esta entrega el hecho de que el dibujo corra a cargo de Michael Gaydos, una verdadera debilidad de quien esto escribe. A continuación tenemos el regreso del mítico Roger Stern, para continuar una de las historias que marcó mi infancia. Corría el mes de Junio de 1982, y los números 229 y 230 de Amazing Spider-man nos dejaban una de los mejores enfrentamientos del trepamuros que recuerdo haber leído: Nada Puede Detener al Juggernaut!, en la que Peter trataba de ayudar a Madame Web y se enfrentaba a la temible mole, dejando claro que quizás fuera una amenaza demasiado poderosa para nuestro amistoso vecino. El arte de un joven John Romita Jr nos presentaba a un héroe al límite de sus fuerzas, dándolo todo por detener al temible villano, y aquí es Lee Weeks quien nos deja un estupendo trabajo que, a ratos, evoca incluso el arte de Romita Jr.
Ahora, el guionista aprovecha la recuperación de los villanos más memorables para rescatar a Juggernaut del olvido, en una historia con sabor a nostalgia, que incluso incluye referencias a los números ochenteros. Se nota que Stern se lo pasa bien recuperando conceptos y diálogos del pasado, y las tres entregas de que consta la historia se pasan volando, dando paso a otra impactante saga, que en este caso recupera al Lagarto. Tras un pequeño prólogo, Zeb Wells y Chris Bachalo se unen de nuevo para recuperar a un Doctor Connors en sus horas más bajas, ahora que su esposa ha fallecido y que la relación con su hijo atraviesa su peor momento. ¿Podrá Spiderman frenarle, ahora que la parte humana de la bestia no tiene nada que perder?
Durante estas historias, el equipo de guionistas arácnido demuestra una vez más que los personajes más sencillos pueden ser recuperados para una nueva generación de lectores, cambiando pequeños elementos de sus personalidades pero manteniendo la esencia, con un resultado final que contentará a partes iguales a lectores veteranos y recién llegados. También el apartado gráfico guarda gratas sorpresas, ya que además de Fiumara o Weeks, destaca Bachalo, quien hace un fantástico trabajo ilustrando el peculiar descenso a los infiernos del Doctor Connors. Y para los que crean que los guionistas han olvidado la trama iniciada al principio de El Desafío, que implicaba la venganza urdida por la familia Kravinoff, que no se pierdan el próximo tomo.
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