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En memoria de Antonio Segura
La pasada semana fallecía a los 64 años Antonio Segura, guionista fundamental del cómic español. Que muchos apenas sepan quién era no es más que otra prueba del tristemente cierto tópico de que uno nunca es profeta en su tierra.
Guionista todoterreno, Segura fue uno de los principales impulsores del cambio de rumbo en el cómic español durante la década de 1980. Alejándose del estilo imperante de la editorial Bruguera, nuestro guionista dejó volar su imaginación hacia terrenos y estilos ajenos a la mentalidad censora, tomando como modelo el cómic británico y francés para realizar historietas con un enfoque adulto, explicito y cierta querencia por la ciencia ficción. Algo lógico para alguien que empezó su carrera como escritor realizando relatos para revistas de este último género.
Pese a su escasa experiencia, su labor llamó la atención de la editorial Norma, que le confió la responsabilidad de relanzar la revista Cimoc. Fue allí donde vio la luz Hombre, western postapocalíptico dibujado por José Ortiz, ilustrador con el que mantuvo su mejor y más larga relación profesional. También Bogey, notable policiaco futurista protagonizado por un sosias del mismísimo Humprey Bogart según los lápices de Leopoldo Sánchez y Orka, otra muestra de ciencia ficción dibujada por Luis Bermejo.
El éxito de estos primeros trabajos (publicados asimismo en el extranjero) le permitió crear Ediciones Metropol, sello editorial con su propia revista donde fue dando salida a sus siguientes propuestas. El proyecto de la revista Metropol partía de un enfoque tan original como ambicioso: recogía varias series (El Justiciero enmascarado, Vito, Yves, su secuela Morgan) ambientadas en la ficticia ciudad de Metropol, siendo la revista una especie de diario informativo de urbe y sus habitantes. Las ventas no acompañaron, pero la calidad era indiscutible, como demuestra que varios de sus personajes encontrasen refugio en otras editoriales tras el cierre.
Precisamente en las páginas de Metropol fue donde apareció Kraken, el trabajo más conocido de Segura junto con Hombre. Dibujada por Jordi Bernet, Kraken narra las aventuras de un grupo de policías encargados de vigilar los subsuelos de una urbe futurista enfrentados a un terrible monstruo. Combinando elementos de policiaco y terror, la serie se convirtió rápidamente en una cabecera de culto de éxito internacional. Durante los años siguientes Segura fue dando salida a series como El Nuevo Necronomicon, Jack el destripador, Savant, Burton y Cyb o Juan el Largo. Dibujadas en su mayoría por José Ortiz y publicadas para diferentes cabeceras como Cimoc, Zona 84, Creepy o Gran Aventurero, nuestro escritor dio muestras de su buen hacer en registros tan distintos como el terror, la fantasía heroica, la comedia fantástica o la aventura. Mención especial merece Eva Medusa, serie de ambientación mística y tono erótico dibujada por Ana Miralles.
Ya entrada la época de los 90 la floja situación del cómic nacional hizo que emigrase a Italia, mercado para el que publicó Ozono, serie de ciencia ficción de corte ecologista realizada junto a su inseparable Ortiz. En los últimos años se había convertido en guionista habitual de Tex, siendo el primer no italiano en escribir para esta mítica serie de western. De haber nacido en Francia o EE.UU posiblemente a día de hoy estaríamos lamentándonos de la muerte de un clásico. Al menos nos queda su obra, para poder reivindicarle como uno de los grandes.
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