Marvel Omnibus - Masacre de Gerry Duggan #1

El mercenario bocazas contra Kennedy, Roosevelt y Nixon

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He de reconocer que Masacre nunca ha sido santo de mi devoción. Su incesante verborrea y el hecho de que se salte a la torera las reglas no escritas del mundo del cómic, como es ignorar la cuarta pared no le han ayudado mucho. Y es que este tipo de interacciones con el lector sólo se las permito a cierta abogada verde y los más veteranos sabrán de lo que hablo. El caso es que la creciente popularidad de Masacre, en el mundo del cómic primero y en el cine a continuación, sólo consiguió multiplicar el número de apariciones del personaje en casi todos los títulos de la editorial y, lo que es peor, que se crearan nuevas series a su mayor gloria casi cada mes. Este hartazgo provocó que me cerrase en banda, al menos en la parte impresa, ya que reconozco habérmelo pasado muy bien con cada una de las películas estrenadas hasta la fecha.


La llegada de Marvel Now! provocó que mi espíritu marvelita volviese con inusitada fuerza, y me decidiese a recuperar series a las que hacía tiempo que no dedicaba especial atención, como Iron Man o Hulk, ahora en manos más que competentes para volver a fijarme en ellos. Y algo parecido sucedió con Masacre. He de reconocer que el nombre en el que primero me fijé fue el de Tony Moore. Cocreador de Los Muertos Vivientes junto a Robert Kirkman e ilustrador de los primeros números de la serie, y de la siempre recomendable Fear Agent junto a Rick Remender, el arte de Moore tiene un componente divertido y cartoon que siempre me ha atraído, lo que me ha llevado a seguirle después de su salida de la serie de zombies de Image. Junto a Moore, unos gamberros Brian Posehn y Gerry Duggan con ganas de liarla, a tenor de las tramas elegidas para abrir fuego con esta nueva numeración que Marvel Now! nos regalaba.


La trama de Presidentes Muertos es tan desquiciada como efectiva. A alguien preocupado por la marcha del país, se le ocurre que quizás sea una buena idea traer de vuelta a los presidentes que han hecho de los Estados Unidos un gran lugar, para devolverle la gloria pasada. Por supuesto, el experimento sale mal y los presidentes muertos, ahora revividos, se salen de madre, necesitando que alguien ponga la situación bajo control. A otro alguien se le ocurrirá que Masacre es la mejor elección para poner orden en esta dramática situación, por lo que la acción desenfrenada está servida. Se conoce que Tony Moore aprendió bastante durante su tiempo como dibujante de Los Muertos Vivientes, ya que pone aquí todo su empeño en mostrarnos el lado más gore y brutal de la invasión presidencial, y al haberlo leído hasta la fecha en blanco y negro, hace que con el salto al color el resultado final sea aún más increíble.


Lo más increíble de todo es que los números de que trata esta saga que enfrenta a las versiones zombificadas de los presidentes americanos con nuestro mercenario bocazas favorito se pasa volando, tiene un ritmo trepidante y mil y una referencias para que los fans del personaje se lo pasen bomba buscando guiños ocultos. La edición que ahora nos trae Panini, de mayor tamaño y tapa dura, incluye además otras historias de esta etapa del personaje, como su enfrentamiento con Vetis, un demonio que tratará de resolver la dramática situación con la que despedíamos el primer arco de Posehn y Duggan, y alguna que otra sorpresa que aquí no desvelaremos. Una buena ocasión para aquellos que, como yo, nunca hayan dado a Masacre la oportunidad de divertirles.