Superman y Batman: Generaciones – Integral

Byrne firma una inspirada carta de amor a los personajes más icónicos de la casa

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Aunque el paso de los años no le haya tratado del todo bien y cada año le echemos más en falta en el competitivo panorama actual, lo cierto es que John Byrne es uno de los autores más influyentes que haya tenido el mundo del cómic. Es innegable su talento como guionista y dibujante y, aunque muchas de sus grandes obras vieran la luz con la Marvel, fue uno de los autores que ayudaron a marcar una época en DC Comics, sobre todo a raíz de la publicación de El Hombre de Acero, la miniserie que ayudó al relanzamiento de Superman tras las primeras Crisis en Tierras infinitas, que le consiguió quedarse en las distintas series dedicadas al personaje en años venideros. El caso de Batman fue algo distinto y, dejando a un lado proyectos muy interesantes como la novela gráfica del personaje publicada en 3D de la que esperamos pronto una reedición en nuestro país, y una saga en tres entregas llamada Las Muchas Muertes de Batman en la que se encargaba de los guiones, pocas fueron las oportunidades del autor de dejar su impronta sobre el personaje.


Llegamos así al año 1999, en el que se publicaba por vez primera Generaciones, una miniserie de cuatro entregas que nos llevaba al pasado, hasta 1939 y a la exposición universal de Metrópolis, en la que Batman y Superman se conocen por vez primera y forjan la invariable amistad que a día de hoy mantienen. Los siguientes capítulos se desarrollarían en las consecutivas décadas, mostrándonos la peligrosa alianza llevada a cabo entre Lex Luthor y el Joker, la divertida aparición de Batmito y Mxyzptlk, o la aparición de villanos clásicos como Brainiac o Ra´s Al Ghul. Se nota que Byrne disfruta con el encargo, como si hubiese esperado toda la vida a poder utilizar a los personajes y su impecable plantel de secundarios, sobre todo bajo la premisa de que estamos ante una obra con el sello Otros Mundos, en la que todo puede suceder. En este caso, el truco que el canadiense guarda bajo la manga es que la acción transcurre en tiempo real, es decir, que en el capítulo que tiene lugar en 1969, nuestros protagonistas han envejecido 30 años. Además, les veremos casarse, tener hijos, envejecer y hasta tener nietos, haciendo referencia al título de la serie, llevándonos década tras década, hasta un capítulo final fechado en 1999, con un epílogo especial que nos transportará hasta 2919, en el que las sorpresas están garantizadas.


La serie fue magníficamente recibida entre los lectores, lo que provocó que en el año 2001 llegase una secuela, de nuevo de cuatro entregas, que elevaría el nivel con nuevos capítulos que comenzaban en 1942 en plena batalla contra el Führer, para ir saltando en esta ocasión cada once años, con historias que encajaban a la perfección en el complejo y magníficamente ilustrado puzle de esta nueva continuidad ideada por Byrne. Nuevas amenazas, nuevos escenarios y personajes del universo DC que antes no aparecían, llegaban ahora para ofrecer una buena dosis de nostalgia y espectacularidad. Quedaría todavía una tercera entrega, esta vez en clave futurista, publicada en doce entregas en formato grapa, que pondrían la guinda a este proyecto escrito desde el respeto más profundo del autor hacia los dos iconos DC. Tras la publicación dentro de la colección de novelas gráficas de Batman y Superman y de nuevo oyendo las peticiones de los lectores, nos llega ahora la edición integral de la serie que incluye todas las portadas originales y que nos permite acompañar a Byrne por este viaje en el tiempo acompañando a un universo que rebosa color y fantasía en cada página.