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El Poderoso Thor V4 #1-6: La Semilla de Galactus Esplendoroso regreso de Coipel a Thor
El Poderoso Thor V4 #1-6: La Semilla de Galactus EEUU - 2012 Guionista:Matt Fraction Dibujante:Olivier Coipel
Editorial:Panini -
24 páginas - color
Precio:1,95
El devorador de mundos se acerca a la Tierra para saciar su legendario hambre, pero su objetivo no es el orbe azul sino el reino dorado con el que convive.
Pocos artistas encontramos hoy en día con tanto talento y elegancia como Oliver Coipel. Su afianzamiento se produjo en el crossover Dinastía de M, un escaparate perfecto para que el francés demostrase lo que sus lápices son capaces de conjurar. Y de un entorno puramente superheroico se acabó desplazando a un ámbito más orientado al a fantasía heroica, en donde su trazo ejecuta con detalle y precisión el magno Reino de Asgard, a sus nobles guerreros y la interminable ristra de criaturas fantásticas que pueblan los nueve mundos.
La escasa docena de capítulos que dibujó del Thor de J. Michael Straczynski fue suficiente para redefinir la estética del dios del trueno y servir de base para las adaptaciones cinematográficas. Pero nos supo a poco, así que fue más que bienvenida su participación en el evento Asedio y su actual regreso para relanzar la serie principal de Thor junto a Matt Fraction. Sin embargo, por muy afinado que esté el dibujante no se puede afirmar lo mismo del guionista.
Trama alargada
Fraction es capaz de engendrar ideas que a priori resultan muy enriquecedoras para su encargo en cuestión, caso aplicable a su interminable andadura en Iron Man o a su ecléctica etapa con la Patrulla-X. Pero tanto en ese caso como en el de Thor, acaba estirando en exceso las tramas y diluyendo la historia entre demasiados secundarios intrascendentes. Una cosa es que quiera enlazar las aventuras imposibles de estos héroes con la cotidianeidad del ciudadano de a pie, pero sin la habilidad a tal efecto de otros como Kurt Busiek, acaba transformándose en un habitual recurso para malgastar valiosas páginas. En el caso de La Semilla de Galactus, la saga de seis partes en la que el gigantesco alienígena pretende saciar su legendaria hambre en Asgard, cualquiera con dos dedos de frente hubiese eliminado las anodinas páginas dedicadas a Volstagg y a los habitantes de Bonxton para dedicarlas al duelo cósmico entre los asgardianos, Galactus y Estela Plateada. En lugar de eso nos quedamos con una batalla llena de prolegómenos pero resuelta rápidamente y a trompicones. Menos mal que todo ello, como ya hemos apuntado, queda embellecido hasta el extremo por el intachable Coipel (aunque necesite un poco de ayuda en el penúltimo episodio).
El cierre de la historia establece algunos elementos a retomar tras Miedo Encarnado, como el nuevo status de Estela y su participación en Los Defensores, otra cabecera asignada a Fraction, por ello va a ser imprescindible leer el evento para comprender las situaciones que nos encontraremos a partir del séptimo capítulo.
En perspectiva no es un mal relanzamiento, con un arranque ambicioso, pero se aleja mucho del impacto del que orquestó Straczynski porque va perdiendo fuelle sin pausa, y ahí está la diferencia de ventas entre una etapa y otra para atestiguarlo.
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