Marvel Must-Have - La Muerte de Lobezno

Charles Soule nos presenta la “última” historia de Logan

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La línea Marvel Must-Have de Panini Cómics se está convirtiendo en una cita obligada para todos aquellos que quieran conocer más a fondo la historia del universo Marvel gracias a algunas de las sagas que lo han convertido en el destino preferido de los lectores superheroicos. De esta manera, en sus primeras entregas el reciente sello editorial ha recuperado sagas tan celebradas como El Guantelete del Infinito, Civil War, Universo Spiderman, Daredevil: El Hombre sin Miedo o Lobezno: El Viejo Logan. Todas ellas elecciones perfectas para los aficionados más curtidos, aquellos que están empezando o esos que aún tienen que descubrir la magia de la viñeta.


El tomo que nos ocupa recupera La Muerte de Lobezno, saga aparecida originariamente en 2014 en la que Charles Soule (Star Wars: Lando, Star Wars: Obi-Wan y Anakin, Daredevil) y Steve McNiven (la citada Civil War, Nemesis, El Viejo Logan) narraban el inesperado fallecimiento del personaje más famoso de la franquicia mutante. Por supuesto, los sucesos posteriores han demostrado que las majors no suelen dejar que sus más populares creaciones duerman el sueño de los justos durante mucho tiempo pero, aún así, la historia sacudió los cimientos de la Casa de las Ideas y se convirtió en una de las obras más comentadas en el momento de su publicación original.


Tras un siglo vagando por el universo marveliano, Lobezno recibe la noticia de que su célebre factor curativo ha dejado de funcionar por completo. Sin él, su cuerpo no puede afrontar el peso de las heridas sufridas por los años y su esqueleto de adamantium se ha convertido en un veneno que lo acerca a la muerte con cada segundo que pasa. Tras haber ejercido como héroe, villano, asesino, samurái, profesor y hombre-X, Logan deberá enfrentarse a un enemigo con el que no puede negociar y al que no podrá derrotar: su propia mortalidad.

Soule nos presenta un relato cargado de acción y emoción que lleva a nuestro protagonista a los parajes que han definido su vida y que lo vuelve a poner en contacto con muchos de los personajes que han cruzado sus destinos con él. De esta manera, el guionista nos regala un verdadero viaje a la misma esencia de Logan y consigue convertir lo que podía haber sido otro más de esos asépticos eventos editoriales en un final tan emotivo como salvaje.


McNiven se desvela como una elección perfecta gracias a sus adrenalíticos lápices que, además, consiguen entregarnos algunas planchas de indiscutible belleza cuando el relato de Soule nos lleva a los rincones más íntimos de nuestro mutante preferido. Momentos como el sangriento enfrentamiento con Nuke, el reencuentro con Kitty Pryde y ese villano tan unido a ambos, la enésima pelea contra Dientes de Sable o el brutal desenlace del relato se incorporan instantáneamente a la mitología del personaje y entregan al lector recuerdos que quedarán para siempre vinculados a su mutante favorito.