Invencible Volumen 1

La verdadera esencia de un cómic de superhéroes, por Robert Kirkman

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Robert Kirkman debe estar a punto de alcanzar el récord del autor de cómic más conocido por el público no lector. Me explico. Cuando en las salas de cine se produjo el estallido de Marvel, todos los no adeptos al noveno arte comenzaron a ver cómo un señor mayor y canoso se colaba en sus producciones cinematográficas favoritas, y descubrieron que se trataba del responsable de la creación de la mayor parte de los héroes de la editorial. De esta manera, guionistas y algún que otro dibujante entraban a formar parte del colectivo de personajes populares para el gran público, a pesar de que muchos de ellos jamás hubieran pisado una tienda de cómics. Esto nos lleva al gran Kirkman, guionista y creador curtido en grandes editoriales, que llegaría a Image Comics con la sana intención de dejar allí parte de su legado, creando dos de las series más icónicas y superventas del nuevo siglo. Hablamos, claro está, de The Walking Dead e Invincible.


De la primera de ellas, recientemente reeditada por ECC os hablamos no hace mucho en nuestra página web, y a menos que vivas en una cueva, sabrás que cuenta con una exitosa adaptación televisiva, repleta de temporadas y más temporadas, y hasta algún spin off. De la segunda, la que nos ocupa en esta reseña, podríamos decir otro tanto, gracias a la adaptación que Amazon ha realizado bajo la forma de serie de animación, de la que hace poco se ha confirmado una segunda temporada. Si a esto le unimos que ECC ha comenzado también la reedición de este clásico moderno, al tiempo que termina de publicar en nuestro país las últimas entregas, estamos ante un momento irrepetible para los fans de Mark Grayson, y estamos seguros de que serán mucho los que, bien a través del cómic o de la serie de TV, caerán rendidos ante los encantos de esta historia sobre la familia, la amistad y el heroismo.


Nuestra historia tiene como protagonista a Mark Grayson, un joven que compagina sus estudios con el típico trabajo de tarde en una hamburguesería, mientras suspira por alguna compañera de clase y pasa puntualmente por la tienda de cómics a por su ración semanal. Su vida va a cambiar radicalmente cuando su padre decida tener con él la charla que le definirá a partir de entonces, como persona y como héroe. Y es que no se trata de la típica historia de los pájaros y las flores, sino de la revelación de que su padre es en realidad Omni Man, el superhéroe más popular de la Tierra, y que Mark, al ser hijo suyo, ha heredado los poderes de todos los vultrumitas, y pronto harán acto de presencia en la atribulada anatomía del joven.


Esta premisa aparentemente sencilla dará un nuevo y radical giro antes de que finalice el tomo que, por supuesto, no desvelaré aquí para los que aún no lo hayan disfrutado. A pesar del secretismo, sí que puedo deciros que se trata de una de las series más entretenidas que he leído jamás, que tiene todos los ingredientes necesarios para ser devorada casi con ansiedad: unos personajes carismáticos, constantes sorpresas y giros de guion, acción a raudales, y el hecho de que, a pesar de alguna que otra aparición de compañeros de editorial, estamos ante un universo propio y cohesionado, del que nos basta leer Invencible para estar al día de todo lo que debemos conocer del mismo. Aunque no nos queda casi espacio para hablar del dibujo, decir que Cory Walker cumple con el encargo de diseñar y crear unos personajes tan cercanos que podríamos cruzárnoslos por la calle, y que a continuación llegaría Ryan Ottley para elevar aún más el nivel y acompañarnos hasta el final de la serie, 11 tomos después, mejorando número a número. Si queréis engancharos a una serie que no decepciona jamás, no dejéis escapar este primer volumen que ahora llega a las librerías.