Harley Quinn y las Chicas de Gotham

El espíritu de la serie animada sigue vivo

Tweet

Artículos relacionados

Los que crecimos merendando después del cole mientras disfrutábamos con Batman: La Serie Animada teníamos claras dos cosas: la primera, lo agradecidos que estábamos a nuestros padres por mantener la suscripción a Canal +, y la segunda, que el estilo de animación de la serie no se parecía a nada de lo que habíamos visto o leído hasta la fecha. Auspiciado por Paul Dini y Bruce Timm, productores de la exitosa propuesta, cada capítulo era al mismo tiempo un homenaje al cine negro, una carta de amor al personaje y, en definitiva, una forma de contarnos quién era Batman muy diferente a la que Tim Burton había utilizado para la gran pantalla unos pocos años atrás. El estilo de animación, personal y dinámico como pocos, te sumergía en cada una de estas pequeñas obras maestras de 22 minutos, para hacerte volar cabeza con la aparición de nuevos villanos cada semana y de alguna que otra sorpresa en forma de invitado especial. Por suerte, las audiencias fueron muy buenas, lo que consiguió mantener el show varios años en antena, dedicar serie propia a Superman o a la Liga de la Justicia, e iniciar la sana costumbre de seguir sacando algún largometraje animado de vez en cuando directamente en formato doméstico (no olvidemos que La Máscara del Fantasma se estrenó en la gran pantalla en algunos países).


El éxito de este tipo de productos se trasladó rápidamente al papel, y pronto vio la luz una serie mensual llamada igual que el programa de TV, que por suerte ECC se ha encargado de ir recuperando en formato grapa desde hace algún tiempo, para alegría de padres que quieren fomentar el gusanillo de la lectura entre hijos y sobrinos, y también para algún que otro despistado coleccionista que ya no sabía donde encontrar los números que le faltaban de anteriores ediciones. A los recientes anuncios de publicación de Las Aventuras de Superman y Batman: Las Aventuras Continúan, se une la llegada de diversos especiales y recopilatorios, como este Harley Quinn y las Chicas de Gotham que ahora nos llega.


Escrito por Paul D. Storrie y dibujado por J. Bone y Jennifer Graves, estamos ante un más que digno heredero del Batman: Amor Loco, esa obra maestra de Bruce Timm que nos conquistara hace más tiempo del que queremos reconocer. La historia, sencilla pero muy entretenida, nos lleva hasta Catwoman, a quien acompañaremos mientras roba un misterioso compuesto de un laboratorio, o al menos eso intenta, ya que se verá sorprendida por Batgirl, con quien comenzara un divertido juego del gato y el ratón al que pronto se añadirán Hiedra Venenosa, Harley Quinn o Renee Montoya. Con un dibujo dinámico y estilizado, claramente deudor del espíritu animado que antes comentaba, y una historia repleta de giros y traiciones, el tomo es una lectura perfecta para llevarnos de nuevo a esas meriendas amenizadas por Batman y para hacer un regalo perfecto a los lectores más jóvenes de la casa.