Invencible Presenta: Atom Eve y Rex Splode

Jóvenes aunque sobradamente superpoderosos

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Lo que Robert Kirkman consiguió con su Invincible sigue siendo impresionante. Crear una serie de la nada y convertirla, 144 números después, en uno de los grandes referentes del cómic de superhéroes es un hito alcanzado por muy pocos autores. La serie, que se ha convertido incluso en una adaptación televisiva de Amazon, cuenta la historia de Mark Grayson, un joven que está a punto de descubrir que es el hijo del mayor superhéroe del mundo y, de paso, que ha heredado sus habilidades superheroicas, las cuales están a punto de ver la luz, gracias a la llegada de la temida pubertad. A medio camino entre la comedia familiar y el cine de acción, la propuesta de Kirkman conquistó a los lectores casi sin esfuerzo, algo muy complicado ya que no se partía de ningún personaje que fuera conocido por los fans, y todo el elenco de la serie surgía de la mente de un inspiradísimo guionista.


Ese es uno de los motivos principales que llevó a la publicación de las dos miniseries que hoy publica ECC en tapa dura, como complemento perfecto para los volúmenes con los que está recopilando la serie original al completo. Y es que, la gran cantidad de personajes, principales y secundarios, héroes y villanos, que llenaban cada número de la serie, era tal que muy difícilmente podía detenerse la acción para contarnos algo más de los personajes, y mucho menos su origen, que se dejaba entrever aquí y allí en algunas frases o flashbacks, pero que dejaba inacabada la tarea. A Kirkman debió parecerle buena idea que estas historias no se quedasen sin contar, y puso en marcha sendas miniseries dedicadas a Atom Eve y a Rex Splode, en la que contar por fin el origen de dos de los compañeros de aventuras de Mark y satisfacer la curiosidad de los lectores.


La complicada agenda de Kirkman, que recordemos simultaneó la publicación de Invincible con la de The Walking Dead, impidió al barbudo guionista encargarse también de las miniseries, encargando a Benito Cereno su escritura, y a Nate Bellegarde su dibujo, también ante la imposibilidas de que Cory Walker o Ryan Ottley repitiesen aquí su labor. La primera miniserie nos cuenta el nacimiento de Atom Eve, desde su complicado parto ayudado por el Dr. Brandyworth, hasta su llegada a manos de un matrimonio, que va a criar desde entonces y sin saberlo, a la futura superheroína. Luego le toca el turno a Rex, un joven ladrón que será objeto de un peligroso experimento, que le dotará de la habilidad de cargar de energía cualquier objeto, hasta hacerlo explotar literalmente. Su posterior encuentro con Eve cambiará radicalmente su destino, ya que pasará de ser una especie de héroe a sueldo, a quien dirige de forma cuestionable Raddcliffe, a rebelarse contra él, y pasar a formar parte de la élite de los superhéroes, acompañando a Atom Eve, Invincible y el resto de héroes en sus aventuras. Sin duda la sencillez de estas historias las convierten en el complemento perfecto de la serie principal, ya que amplían lo que ya conocemos sin traicionarlo, y al mismo tiempo, pueden ser leídas de forma independiente, quizás como forma de entrada al universo de Invincible.