Las Crónicas de Conan: Bajó de los Cerros Sombríos

Panini presenta el primer volumen del Conan de Dark Horse

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La segunda juventud que está viviendo Conan en las librerías españolas es un acontecimiento digno de estudio. Además, las diferentes idas y venidas de los derechos del personaje han convertido el viaje editorial de la más popular creación de Robert E. Howard en una aventura, por lo menos, igual de apasionante que las vividas por el cimmerio en las páginas de las novelas pulp que lo vieron nacer.

La verdad es que, aparte de las excelentes ediciones que Panini está realizando de Conan El Bárbaro y la imprescindible La Espada Salvaje de Conan, los fans del tosco guerrero estaban deseando un título dedicado a los “otros” cómics de Conan, aquellos publicados hace unos años por Dark Horse Comics y lanzados en nuestro país por Planeta mientras disfrutaba de la posibilidad de editar cómics cimerios en nuestro país. Sin embargo, aquellos excelentes ejemplos de adaptación de la mitología howardiana pasada por un prisma más moderno seguían sin recibir la edición que merecían. Hasta ahora…

Kurt Busiek demuestra ser un más que digno sucesor de Roy Thomas, considerado el cronista oficial de las aventuras comiqueras del cimmerio, en los números que daban el pistoletazo de salida a esta propuesta y que encontraremos en el volumen que nos ocupa. En las páginas que abren este volumen (Conan the Legend #0), Busiek decide hacer una declaración de intenciones y dejar bien claro que no va a escatimar en violencia, salvajismo y crudeza en esta historia corta que se convierte en un homenaje sincero y brutal de la realidad del personaje, que adapta su mitología a los nuevos tiempos y que resume de manera espectacular los cimientos e historia que sustentan el mundo en el que se mueve nuestro protagonista.


Esta primera entrega sirve además para mostrarnos la brillante elección de Cary Nord como artista principal de esta etapa, con algunas planchas que dejarán sin aliento al más curtido lector bárbaro. Además, la decisión del colorista Dave Stewart de no entintar los lápices de Nord y aplicar directamente el color sobre el arte del dibujante se convierte en otro acierto pleno, confiriendo al resultado final un aspecto onírico cercano al de grandes artistas como Frank Frazetta.

Tras esta introducción, Busiek alterna en la colección la readaptación de clásicos literarios de Robert E. Howard con números que nos muestran los años iniciáticos del personaje, desde su violento nacimiento en el campo de batalla hasta aquellos eventos que lo han curtido y convertido en el montaraz guerrero que conocemos.

De esta manera, en este volumen asistiremos a retellings de clásicos como La Hija del Gigante de Hielo o El Dios del Cuenco entre otros, que nos mostrarán las historias ya aparecidas en las propuestas marvelianas de Conan bajo un nuevo prisma y complementarán perfectamente esas otras adaptaciones. De hecho, El Dios del Cuenco se convierte en una de las más acertadas aportaciones al título, gracias al misterio servido por Busiek y al paseo que Conan realiza por el terror más puro en este relato.

En resumen, otra imprescindible adición a las tebeotecas bárbaras que no decepcionará a ningún lector cimmerio y que asegura un salvaje paseo por las salvajes tierras recorridas por nuestro imparable guerrero.