Flash: La Guerra de Un Minuto La familia de velocistas, unida de nuevo para enfrentarse a La Fracción
Como no podía ser de otra forma, los guionistas de Flash se suceden a un ritmo frenético. Dejando a un lado el chiste fácil, lo cierto es que, tras la marcha de Joshua Williamson como guionista, dejándonos una de las etapas más vibrantes y redondas del personaje, llegaba el anuncio de que Jeremy Adams sería el nuevo escritor del velocista, aunque antes de que pudiéramos comenzar a valorar lo que nos ha dejado su estancia en la colección, se anunciaba que Simon Spurrier sería el encargado de un nuevo reinicio para uno de los personajes más importantes de DC. Antes de que estos números lleguen a nuestro país, es el momento de valorar la última gran historia orquestada por Adams antes de su marcha.
La llegada de Jeremy Adams a la serie retomaba uno de los grandes temas del personaje, el concepto de familia, con un enfoque muy similar al que William Messner Loebs utilizara en los años ochenta, durante su celebrada etapa, en la que muchos conocimos por ver primera al personaje. No me refiero solo al concepto de familia de superhéroes, como es el caso que nos ocupa, sino al hecho de que los personajes están unidos por lazos familiares, y deben valorar como actuar en cada ocasión, salvaguardando el bienestar de los suyos. El mejor ejemplo de este enfoque lo tenemos en la forma en la que la saga ha sido publicada. No se trata de un crossover al uso, ya que el resto de personajes y colecciones no se vieron afectadas por ella, como sí que pasó con la famosa saga Flashpoint, pero sí que va saltando de una serie a otra, incluyendo especiales, para contarnos uno a uno, como afectan lo que sucede desde la llegada de La Fracción, la nueva amenaza que se nos presenta ya en las primeras páginas del tomo.
De esta forma, el protagonismo se comparte entre toda la familia de velocistas, que recordemos se ha ido incrementando en los últimos años, contando con los habituales Wally West y Barry Allen, pero incluyendo también a viejos conocidos como Max Mercury o Bart, que aportan nuevas perspectivas a lo visto hasta ahora en la serie. Haciendo honor a su pegadizo título, la guerra que tiene lugar en las páginas del tomo solo transcurre en unos pocos instantes para el resto de nosotros, y aunque casi imperceptible, dejará consecuencias para Wally y los suyos. La Fracción es una raza alienígena que está utilizando la fuerza de la velocidad como arma, conquistando sin parar un mundo detrás de otro, y ahora es el turno de la Tierra. A lo largo de los números de la serie, y del especial que fue publicado con motivo de la saga, Adams va cediendo el protagonismo a los distintos personajes, dándoles la oportunidad de protagonizar una parte del relato, para confluir todos en el final de la historia. Una saga que gana leída en tomo, y que mantiene un ritmo trepidante desde el inicio, ideal para los fans de la familia de velocistas.
|
|
|