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Marvel Saga - El Castigador de Ennis y Dillon #4: Killing la Vida Loca Nuevo volumen de la aclamada y salvaje etapa de Ennis con el personaje
Cada vez que leo una nueva historia guionizada por Garth Ennis me pregunto cómo el autor es capaz de escribir tal cantidad de burradas por página, y lo que es más difícil, como se las arregla para que las editoriales decidan siempre darle luz verde a sus proyectos, por descabellados que sean. Si pensamos en series como The Boys, escrita para el sello Dinamite, en la que el tono adulto estaba claramente definido desde el comienzo; o en Predicador, que veía la luz para Vertigo, el sello adulto de la editorial DC, la cosa tiene cierta lógica, pero si pensamos que el tomo que nos ocupa tiene el sello de Marvel estampado en su portada, la cosa se complica.
La excusa para que esta serie llegase a publicarse la tenemos en la línea Marvel Knights, que ponía el foco en los personajes más urbanos de la editorial, aunque si comparamos esta colección con el Daredevil de Brian Michael Bendis, que también llegó dentro de esta línea, lo que pasa en las páginas de la serie del abogado ciego palidece con lo que podemos leer en esta cuarta entrega dedicada al Castigador. Esta nueva entrega se abre con una nueva visita de Frank Castle a la jungla, en la que debe traer de regreso a un poderoso capo de la mafia, que debe volver a Nueva York para recuperar el orden establecido.
Esta historia resulta ser solo un aperitivo para la llegada de Lobezno, en la que la violencia que destila la pareja de antihéroes es solo comparable a la trama propuesta por Ennis, y es que el vacío de poder de la mafia neoyorkina va a ser cubierto por una nuevo y peculiar grupo mafioso… compuesto por enanos. Dejando bien lejos toda corrección política, el guionista consigue arrancarnos una de esas sonrisas tras las que inmediatamente nos arrepentimos. Una historia salvaje y divertida a partes iguales que difícilmente podemos concebir en los tiempos actuales, en los que siempre hay un colectivo ofendido por lo que alguien escribe o dibuja.
También se incluye aquí una historia en la que Ennis deja claro sus raíces irlandesas, para llevarlo de nuevo de viaje, y de camino, hacer un repaso a los temas políticos del país, que incluyen al IRA y muchas otras referencia de su pasado inmediato, que pasados por el filtro del popular guionista, resultan un coctel de violencia y muy mala leche, al que estamos ya acostumbrados sus fans. El tomo se cierra con una historia corta en la que contamos con el dibujo de Joe Quesada, editor en jefe de la editorial por aquellos entonces, que demuestra que a nadie parecía importarle el tono que estaban tomando las aventuras del Castigador, que muy pronto haría que fuera relanzada bajo el sello MAX. Pero eso lo veremos en próximos volúmenes de la serie.
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