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Video Girl AI #04 Ya que nos han dejado a los dos…
Una de las mejores noticias que hemos recibido los aficionados al manga en este año ha sido la decisión de Planeta Cómic de recuperar Video Girl AI de Masakazu Katsura, en una cuidada edición en formato kanzenban, en nueve volúmenes que recogerán la obra completa, incluida la secuela Video Girl Len. Los lectores más veteranos recordarán la edición que Norma Editorial hizo de la serie en los años 90, en algo más de cuarenta entregas y formato comicbook con lomo, pero el tiempo transcurrido desde esta edición hacía que llevásemos mucho tiempo pidiendo una nueva edición, más cuidada y completa, de la que podemos ya disfrutar.
Nos llega ahora el cuarto volumen de la serie, en la que seguimos teniendo a Yota como protagonista absoluto, aunque nuevos personajes siguen sumándose a esta epopeya romántica con toques de ciencia ficción, que nos conquistó hace años y que sigue leyéndose con la misma fluidez y buen rollo de antaño. En los primeros números de la serie, el protagonismo lo acaparaba el triángulo amoroso formado por Yota Moteuchi, su mejor amigo, Takashi Niimai, y su eterno interés romántico y compañera de clase, Moemi Hayakawa, la serie ha ido evolucionando para dar cabida a nuevos rostros y, por supuesto, a nuevos equívocos sentimentales.
Los últimos desengaños sufridos por Yota le han llevado a deambular por las calles, casi sin ganas de vivir, lo que le llevará a verse involucrado en una pelea callejera, de la que sale mal parado. Por suerte, una misteriosa chica sale a en su defensa, y le evita mayores heridas, para terminar viviendo con Ai y Yota, ya que asegura ser una vagabunda que no tiene lugar donde vivir. Pronto conoceremos su verdadera identidad, y que se trata de una persona que ha jugado un importante papel en la infancia de Yota, y que ahora regresa para complicar aún más sus sentimientos.
Y es que, a la nueva Ai, que conoce parte de su pasado pero no quiere desvelar nada a Yota, y que tiene a una nueva y poderosa enemiga, se suma ahora el malentendido con Nobuko, producido durante el viaje que ha realizado, y por si esto fuera poco, Takashi vuelve al terreno de juego, poniendo a nuestro atribulado protagonista entre la espada y la pared. El autor demuestra que sabe llevar a sus personajes y los sentimientos que tienen hasta el límite, y por eso conforme llegamos al final de este cuarto tomo, pondrá a una de las protagonistas en una peligrosa y delicada situación, de la que solo podrá salir si Yota es capaz de vencer a sus emociones y acudir en su ayuda, aunque tendremos que esperar al siguiente volumen para conocer las repercusiones de sus actos.
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