Los Nuevos 52: Batman #1

Snyder y Capullo como cabezas pensantes

Los Nuevos 52: Batman #1 Estados Unidos - 2012
Guionista:Scott Snyder
Dibujante:Greg Capullo
Editorial:ECC Ediciones - 48 páginas - color Precio:3,50

PUNTUACION
4/5

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Hablar de Scott Snyder es hablar, en estos momentos, de uno de los nuevos padres del Murciélago. Su relación con Batman cada vez crece más, ya que su andadura comenzó en la antigua Detective Comics tocando una decena de números y prestó sus guiones para la bien acogida Batman: Puertas de Gotham. Este trabajo, siempre elogiado por la crítica, le ha valido un puesto de honor junto con Greg Capullo en el reinicio del héroe de Gotham.

Y Gotham es precisamente la gran protagonista en la cabeza del guionista y en todas y cada una de las páginas de este cómic, exploración que ya comenzó en la serie antes mencionada. A medida que vamos leyendo, los personajes no son sino una mera excusa para ir explorando los rincones más oscuros de la ciudad que acribilló a balazos a dos de sus más reconocidos benefactores: Thomas y Martha Wayne. Porque, ¿qué son si no, tanto héroes como villanos, tanto buenos como malos, distintas encarnaciones de la ciudad? La personalidad de las personas es un prisma que refleja todos los aspectos de sus callejones.

Tanto es así que el primer número está atravesado casi totalmente por un discurso de Bruce en torno a qué es, precisamente, Gotham City, y en el que insta a pensar en el mañana y dejar el pasado atrás. Un discurso genial, bien trabado, entusiasta y que… ¿puede ser un simpático guiño a lo que precisamente ocurre con DC Comics en estos momentos? De todos modos, parece una sincera invitación a que continuemos leyendo, y la verdad es que se lo gana con merecimiento.

En un número que se centra, como no podía ser de otra manera, en sentar bases, se nos presenta a los acompañantes de Bruce Wayne en su camino: Dick Grayson como Nightwing, Tim Drake como Red Robin y Damian Wayne, el flamante y “recién estrenado” hijo de Bruce, como Robin. Pero también conocemos a Alfred, al comisario Gordon y a otros secundarios que seguramente tendrán mucho que decir, como Vicky Vale o Lincoln March, que ha alcanzado una compenetración casi instantánea con el presidente de Empresas Wayne.

Conflictos internos

Y se pueden ver en sus páginas aspectos básicos de estos, como son el conflicto que mantiene Bruce con Damian –tiene una edad muy mala…- y ampliados en la serie Batman y Robin; la eterna lucha con su pasado de Dick, que se analiza a fondo en la serie Nightwing; el sempiterno humor sarcástico combinado con sus cuidados de Alfred, el reflejo de la relación del Murciélago con el Departamento de Policía…

En cuanto al apartado gráfico, todos Capullo ha demostrado que tiene una habilidad excelente para captar instantáneas maravillosas de la Ciudad de Gotham. Es capaz de combinar de manera elegante y majestuosa el cielo roto y resquebrajado por las cornisas y decorados góticos y oscuros, lo barroco de sus interiores, pero también para plasmar la tecnología punta que emplea Batman para ayudarse en sus investigaciones.

Pero un detective no es nada sin un misterio que resolver. Y si el marco es interesante, el caso lo es más. Después de un giro de guion que nos dejará los huesos halados al final del primer número, “Bruce Wayne morirá mañana” es lo único que se sabrá con certeza hasta que el Tribunal de los Búhos haga su aparición desde las sombras: “Cuidaos del Tribunal de los Búhos, que nunca deja de vigilar, y manda en Gotham desde las sombras […] Os vigilan […] No habléis de ellos ni en susurros o enviarán la Garra para que muráis.”
Y Bruce Wayne se ha cruzado en su camino. La Garra viene en camino. Y le “encanta matar a los Wayne.”